El consorcio de nueve empresas mexicanas que pretendían participar en el proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México decidió hoy separarse en una acción que no las exime de participar solas o en asociación con otros grupos.
La noticia surgió horas después de que el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray anunció el recorte al gasto de 124 mil millones de pesos y la suspensión de dos grandes proyectos: el tren México-Querétaro y el tren transpeninsular de Yucatán a Quintana Roo.
Inicialmente, la agencia Bloomberg Business filtró la información de la disolución del consorcio conformado por las empresas ICA, Grupo Carso y Constructora TEYA, de Grupo Higa, entre otras. La ruptura, dijo, no impide que cualquiera de los participantes pueda participar por su cuenta en la licitación.
Horas más tarde, Alonso Quintana, director general de ICA, confirmó la noticia al diario Reforma.
El directivo explicó que el acuerdo de escisión fue suscrito por el grupo de constructores de mexicanos que originalmente constaba de nueve empresas.
“Los mismos miembros del consorcio decidimos que no era la mejor manera de entrar a ese proyecto, pero no quiere decir que hayamos perdido interés o que no queremos participar”, declaró.
El proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México está valuado en 11 mil millones de dólares. Se prevé que las primeras bases de licitación sean publicadas en febrero próximo.