Hace unos días la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal corroboró el asesinato de una empleada en el Liverpool de Perisur. La empresa retiró el cuerpo antes de que hiciera el levantamiento el MP, además de que pidió la intervención de un médico privado contratado por su área jurídica, ese médico había dicho que la mujer había muerto por un paro cardiaco y no asesinada… ¿quién era él?
Se trata de Mariano Espinosa y el doctor mintió al certificar que Angélica Trinidad Romero había muerto de un infarto provocado por hipertensión arterial.
El médico fue contactado, junto con una agencia funeraria, el 16 de noviembre pasado por el área jurídica de Liverpool, tras el aviso que le dio la gerencia al descubrir el cuerpo de la mujer.
La PGJDF aseguró que las acciones del médico son un delito.
El subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la PGJDF, Óscar Montes de Oca, afirmó:
«Evidentemente que sí (hay un delito). Hay una contradicción entre lo que manifestó en el certificado de defunción contra los resultados de la necropsia»
Además, la agencia funeraria contratada por la tienda se llevó el cuerpo de la empleada…eso es completamente irregular:
«Es irregular porque el médico certifica que se trata de un infarto y de hipertensión arterial, es decir, de una muerte natural por enfermedad (…) Ya teniendo nosotros los resultados de la necropsia pues resulta ser contradictorio (…) Cuando se presume que (una muerte) deriva de algún delito, entonces sí es incorrecto ese actuar porque debieron dar vista al Ministerio Público»
Si alguno de ustedes ha visto la fotografía de la mujer sin vida se darán cuenta de que la imagen es terrible y que era muy difícil que el doctor confundiera un asesinato con una muerte por infarto.
Versiones encontradas
Liverpool y la PGJDF tienen versiones encontradas sobre la actuación de las autoridades.
Según la empresa, la autoridades tuvieron conocimiento del asesinato apenas se dieron cuenta del cuerpo, pero la PGJDF dice que no fue hasta que denunciaron los familiares de la empleada que se enteraron del caso.
En un breve comunicado Liverpool dijo:
«Liverpool lamenta profundamente la pérdida de nuestra colaboradora Angélica Trinidad Romero Severiano, quien falleció el 16 de noviembre en la tienda Perisur, situación de la que tomó conocimiento la autoridad de inmediato»
Un vocero de la empresa le dijo a CNNExpansión que, incluso, las autoridades llegaron al lugar de los hechos:
«Ante la inconformidad de familiares por el traslado del cuerpo (por el servicio funerario), ese mismo día se presentó la denuncia correspondiente ante el agente del Ministerio Público, quien inició la averiguación previa respectiva y dio intervención a peritos en materia de fotografía, criminalística y medicina forense, además de ordenarse la práctica de la necropsia»
El subprocurador informó que la inconformidad de la familia se dio cuando notaron en la funeraria que Trinidad Romero tenía golpes en su cuerpo y moretones:
«Empiezan a expresar ahí su malestar por la forma en que se manejó el asunto y eso presiona al abogado, al representante legal de la empresa, y va y denuncia los hechos ante el Ministerio Público ya a las 8 de la noche»
Recordemos que encontraron el cuerpo en la mañana de ese día.
La investigación continúa
El subprocurador aseguró que el apoderado legal de la empresa se ha mantenido al pendiente del caso tratando de cumplir con los requerimientos de las investigaciones.
Uno de esos requerimientos son los videos de seguridad, los cuales, a pesar de que ya ha pasado tiempo del asesinato, no los han entregado.
Por otro lado, la compañía expresó:
«Desde un principio Liverpool ha colaborado y seguirá colaborando con las autoridades con todo lo que requieran para que se esclarezca la muerte de nuestra colaboradora»