Los equipos de investigación hallaron un video que muestra los últimos segundos dentro del vuelo de Germanwings, que el copiloto alemán Andreas Lubitz estrelló en los Alpes franceses de manera deliberada por causas aún desconocidas.
El diario alemán Bild y la revista francesa Paris Match dan cuenta de la grabación, la cual no han dado a conocer. Los medios han dicho que el video fue recuperado en los escombros por una persona próxima a la investigación.
Según Bild, la nueva evidencia demuestra que los pasajeros a bordo del avión supieron que se encontraban en una situación de peligro. En varias ocasiones se escuchó que la gente decía en diferentes idiomas: “Dios mío”.
“La grabación fue hecha desde muy atrás del avión. No está claro si fue realizada por una persona que estaba de pie o sentada. Tampoco se sabe si fue un miembro de pasajeros o de la tripulación quien hizo la filmación”, dice el diario alemán.
En tanto, Paris Match refiere: “la escena es tan caótica que no se distingue a nadie pero los gritos de los pasajeros develan que eran perfectamente conscientes de lo que iba a ocurrir”.
“Se oye gritar ‘Dios mío’ en varios idiomas. También se oye, al menos en tres ocasiones, golpes metálicos que dejan pensar que el piloto intentó abrir la puerta de la cabina con un objeto pesado. Hacia el final, tras una sacudida más fuerte, los gritos se intensificaron. Y luego, nada más”, dice la descripción de la grabación a la que tuvieron acceso los medios.
De acuerdo con el diario Bild, poco antes del final del video parece ser que parte de la aeronave choca contra una montaña. En el video, dice el medio, se puede ver que la aeronave se lanza de golpe a una lado. Dice que al final se escucha una vez más a la gente llorar, y a continuación, termina el video.
El Fiscal de Marsella, Brice Robin, dijo a dpa que no sabía nada del hallazgo. Según relató, en el lugar del accidente se encontraron varios teléfonos móviles que deben ser analizados. De todas maneras advirtió que estaban en mal estado debido al choque.
“No sé si pueden ser analizados”, dijo Robin, que explicó que esta tarde estuvo en el lugar y no se hablaba de ningún video. Bild y Paris Match indicaron que las imágenes fueron halladas por una persona cercana a la investigación.
El martes de la semana pasada el vuelo 9525 de la aerolínea Germanwings, que cubría la ruta Barcelona-Düsseldorf, se estrelló en los Alpes franceses dejando un saldo de 150 personas muertas. Entre las víctimas mortales había dos mexicanas: Daniela Ayón Razo y Dora Isela Salas Vázquez.
La primera de las cajas negras, que contiene la grabación de los sonidos de la cabina, recuperada el día mismo del accidente, ya permitió establecer una hipótesis muy clara de las circunstancias del mismo.
La Fiscalía francesa sospecha que el copiloto, Andreas Lubitz, se encerró en la cabina cuando el comandante salió al baño y estrelló voluntariamente el aparato.
Bild publica hoy las declaraciones de un investigador del caso en las que reconoce que las pesquisas apuntan a que el “principal motivo” que llevó a Lubitz a estrellar voluntariamente el Airbus 320 fue el miedo a perder su licencia de vuelo.
“El principal motivo para nosotros en estos momentos es que Lubitz probablemente tenía miedo a perder su licencia de vuelo por sus problemas de salud”, asegura el investigador, que no es identificado.
Así, prosigue el razonamiento, tendría sentido que ocultase a su empresa las bajas médicas que recibía y que visitase distintos médicos en busca de una segunda opinión. Según distintas informaciones, Lubitz tenía que renovar su licencia de vuelo este junio.
Este día, los medios refieren que la versión de los últimos instantes del vuelo Germanwings a la que tuvieron acceso fue corroborada por los datos recuperados en una de las dos cajas negras del A320.
“Ésta graba los sonidos y las conversaciones mantenidas en la cabina de pilotaje. Su contenido nos ha sido entregado y resumido por un investigador que ha podido escucharlo”, dice Paris Match.
A continuación la transcripción que hacen los medios del audio:
10h
El avión despega.
10h10
El comandante a Lubitz : “No he tenido tiempo de ir al baño antes de despegar”.
Lubitz : “Ve cuando quieras”.
10h27
El comandante le pide a Lubitz verificar que el avión pueda pasar a modo descenso. Lubitz obedece. Le repite al comandante por segunda vez: “Puedes ir. Puedes ir ahora”.
10h28
Se distinguen ruidos que proceden del asiento: el comandante se quita el cinturón de seguridad. Se oye la puerta que se abre. El comandante le dice a Lubitz : “tú controlas ahora”.
Lubitz responde en un tono que quiere ser tranquilo: “Eso espero”.
10h30
Lubitz está solo en cabina. Cierra la puerta blindada de la cabina : Ahora es imposible que pueda abrirse desde el exterior. Luego, se le oye programar manualmente la velocidad de descenso para acelerarla y pasar de 38 mil pies (11 mil metros) a 100 pies (30 metros) en unos minutos.
10h33
El descenso comienza : el avión pierde pies (900 metros)de altitud por minuto. El control aéreo trata, en varias ocasiones, de contactar con el avión por radio. Lubitz no contesta.
Se oye al comandante que intenta abrir la puerta de la cabina: “¡Soy yo !”. Da varios golpes a la puerta, cada vez más fuertes. Ninguna respuesta por parte de Lubitz. El comandante grita “¡ Por el amor de Díos, abre esta puerta !”.
10h34
Suena una primera alarma, sonora y visual : “¡Caída importante, enderécese!”.
Ninguna reacción por parte de Lubitz.
A través de la puerta de la cabina, se oyen a los primeros pasajeros asustarse en los asientos.
10h35
El comandante pide que se le vaya a buscar una barreta que tenía escondida en la parte trasera del aparato. Suenan golpes más fuertes contra la puerta, seguidos por ruidos metálicos. Sin dudas, el comandante está intentando abrir la puerta con la barreta.
10h37 y unos segundos
Se activa una segunda alarma, sonora y visual: “¡Tierra, enderécese!” .Ninguna reacción por parte de Lubitz.
El comandante grita : “¡Abre esta maldita puerta!”
10h38
Se oye la respiración de Lubitz bajo su mascarilla de oxígeno. Respira normalmente. El avión está a 13 mil pies (4000 metros).
10h40
Se oye un ruido violento que procede del exterior. En ese mismo instante, en el interior, unos gritos. El avión choca contra una montaña con el ala derecha. No se oye ningún otro sonido más que el de las alarmas y los gritos de los pasajeros.
10h41
El avión choca de frente contra el macizo del Estrop a 5000 pies (1500 metros de altitud) y 800km/h.