El caso de Viridiana Castillejos ha sacudido a las redes sociales. La joven, una madre soltera de 23 años de Tapachula, Chiapas, fue violada y golpeada de manera brutal por su ex novio Fred Muñoz Nataren, un sujeto de 35 años a quien había dejado por golpearla frente a su hijo.
“Me engañó diciendo que sólo quería hablar, pero me subió a su camioneta, me alejó de mi familia, amigos y me llevó a donde nadie pudiera ayudarme. Allí me golpeó brutalmente y, tras fracturarme la nariz, me violó sin compasión, como solo una mente desquiciada, trastornada por la lujuria y de instintos despreciables puede imaginar. También trató de desfigurarme”, relató Viridiana en la página de apoyo que se ha creado para localizar a Muñoz Nataren, quien se encuentra prófugo.
Viridiana explicó que los hechos ocurrieron el 21 de febrero pasado. Dijo que tras dejarla inconsciente por golpearla con una pesa Fred Muñoz temió que pudiera declarar en su contra y trató de asesinarla. “Afortunadamente pude sobrevivir pero mi agresor se ha dado a la fuga y continúa libre para acabar de cumplir su amenaza”.
La familia de la joven ha denunciado el caso y lo dio a conocer en redes sociales con la etiqueta #CasoViri; ha pedido por el mismo medio la colaboración de la población para con el paradero del prófugo quien fue visto por última vez a bordo de una camioneta Voyager de color gris oxford.
El sujeto al que señala como el responsable de sus lesiones físicas y presunto violador tiene 34 años de edad y en la página aparecen características específicas para que pueda ser identificado y sea denunciado ante las autoridades.
Entre sus peñas particulares aparece un “tatuaje de puma y brújula en brazo derecho a la altura del hombro, una cicatriz en cuello (garganta) por intubación, otra más bajo el mentón y finalmente una bajo el codo”.
Viridiana denuncio que el sujeto trató de matarla después de la brutal golpiza para evitar que lo denunciara.
“Nataren me dijo que debía matarme porque de otro modo yo hablaría y él iría a la cárcel”, explicó.
Sin embargo, la mujer relata que “pudo herirle y zafarme de él el tiempo suficiente para huir hacia la salida que alcancé en mi total desesperación”.
La mujer detalló que él “aprovechándose de su fuerza física y corpulencia me arrastró al interior de una habitación y, para evitar que siguiera defendiéndome comenzó a golpearme la cara con fuerza. De un puñetazo me rompió la nariz. La sangre brotaba con fuerza y logró marearme de tal modo que pudo reducirme como era su intención desde el principio”.
Junto a una galería de fotografías en que ella aparece golpeada y sangrada, aparece la leyenda: “No sé dónde está y ya me ha demostrado que es capaz de cualquier cosa. Necesito tu ayuda”.
