Literalmente la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT) cerró sus puertas a integrantes del Congreso Nacional Ciudadano, quienes exigen respuestas sobre el mal trabajo del programa de verificación vehicular. Los funcionarios estatales alegaron que la prensa no podía ingresar.
La tarde de este martes, integrantes del mencionado organismo civil llegaron a las instalaciones de la dependencia estatal, luego de que un día antes pidieron que el titular Mario Rincón González los recibiera.
Sin embargo, fueron recibidos por funcionarios de segundo nivel, quienes dieron una negativa; además, ni siquiera abrieron las rejas, siempre resguardadas por policías estatales y auxiliares.
El director de Calidad del Aire y Cambio Climático, José Luis Cortés Penedo, indicó que no se pudo agendar la reunión con Mario Rincón González, debido a que fue apenas un día antes cuando solicitaron la cita.
Indicó que el funcionario estatal se encontraba en una reunión con autoridades de Tlaxcala, para ver la situación del río Atoyac, por lo que fue imposible recibirlos.
Penedo, acompañado de un enviado de la Secretaría General de Gobierno, Vinicio Ramos González, indicó que solo recibirían una comisión de seis personas; sin embargo, se negó a que hubiera prensa en la reunión con funcionarios de segundo nivel.
Luis Soriano, integrante del Congreso Nacional Ciudadano, le exigió que hubiera prensa en la junta para transparentar las cosas; la respuesta fue tajante: “No reporteros”.
Luego de un intercambio de palabras de cerca de 15 minutos, se exigió que estuviera presente el titular de la dependencia, por lo que se prometió agendarlo para los próximos días.
La demanda final fue que se realizara la reunión antes de que Mario Rincón deje el cargo para buscar una candidatura por el Partido Acción Nacional a diputado federal.
Sin prensa
“No se encuentra el secretario, no hubo respuesta a su petición, él ya tenía su agenda con un compromiso previo con el gobierno de Tlaxcala, lo que les puedo ofrecer es que hagan una comisión para platicar”, dijo el funcionario estatal Cortés Penedo, tras las rejas del edificio público.
“Con mucho gusto, pero que tenga acceso la prensa a la plática que vamos a realizar, porque es transparente, lo único que nos interesa es que sea abierto”, respondió Luis Soriano
A grandes rasgos insistió que deberían entrar la media docena de representantes de medios de comunicación.
“Quisiéramos que estuviera Mario Rincón; él es el responsable del programa de verificación y queremos preguntarle al secretario para contrarrestar las interrogantes”, continuó.
“Que quede claro que Mario Rincón, que es hoy candidato a diputado federal por el PAN, misma persona que va a pedir el voto de nosotros los ciudadanos.
”Pero si nos va a pedir el voto el señor, primero que nos explique qué está pasando con los verificentros. Primero va a pedir el voto y luego no nos recibe porque le interesa más platicar con otro estado que con los ciudadanos de Puebla”.
Inmediatamente, Cortés Penedo respondió que no se les recibiría por la agenda, “no estamos hablando que es más importante o que es menos importante, simplemente está atendiendo temas relevantes del estado”, dijo.
Por lo tanto, les pidió el funcionario a los quejosos que hicieran nuevamente una petición de reunión.
—¿Sin presencia de la prensa?— insistió Luis Soriano.
—Si
—¿Por qué?
—Porque estoy en mi derecho de decidir cómo se lleva la reunión, fue la respuesta tajante del funcionario público.
El pasado lunes 2 de marzo, Luis Soriano, integrante del Congreso Nacional Ciudadano, señaló que el culpable del fracaso de la verificación es el titular de la SDRSOT, Mario Rincón González.
Al parecer, el gobierno del estado está más interesado en recaudar más de 600 millones de pesos en multas, que en el discurso de proteger al medio ambiente, comentó.
Asimismo, exigió que se quite las concesiones a los verificentros donde se hallaron a las personas vendiendo hologramas y no solo se les detenga a los empleados, que podrían ser solo empleados obedeciendo al concesionario.
“Han vendido hologramas, han tomado los verificentros contra operarios, y ni así alguno fue clausurado, cuando anteriormente cuando se les detectaba cualquier anomalía se cerraba el establecimiento y no solo culpaban al trabajador”, añadió.
“Antes en un centro de verificación le exigían un área verde, sala de espera y baños y para dar la garantía final de lo que sucedía había cámaras que transmitían a un servidor llamado civet.
”Además había clausuras inmediatas, pero ahora ha pasado de todo, como las aprehensiones y el mal uso de la papelería, pero los verificentros siguen funcionando sin ningún problema.
”Parece que están más interesados en recaudar que monitorear el medio ambiente, ya que la supuesta acreditación de calidad ISO 9000 es falsa, ya que existieron apagones, maltratos y filas de kilómetros”.
Exigió que el plazo o prórroga disfrazada no deba ser solo para los que consiguieron alguna de las siete mil fichas, sino de cien días para acabar con el problema.
Indicó que deben ser entregadas y publicadas las estadísticas de vehículos que verifican por día y no sesgado como por la zona conurbada.