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Hace un par de años decidí comprar un seguro de gastos médicos mayores. Independientemente de mis excesos juveniles y de mi afición por deambular en las madrugadas por la casa, consideré que el gobierno de Rafael Moreno Valle salía con tantas trastadas a cada rato que un día —ni Dios lo mande— me daba la biabetis —como dicen en mi pueblo— o me reventaba el píloro del puritito coraje.
Ustedes queridos lectores deberían hacer lo mismo, estoy segura que no hay cuerpo sano o sobrio que dé para tanto con este gobierno. No hay forma de estar tranquilo ni un día en la semana, si no es Chana es Juana, el caso es que nuestro gobernador que por más aspiraciones presidenciales que tiene, nomás no nos da ni un día de vacación.
Caray, hasta cuándo se va de vacaciones sale con alguna cosa con el objetivo inequívoco de traernos atarantados o mareados. No me crean mucho pero en una de esas el mandatario planeó enfermarnos a todos para que no nos andemos quejando de todo lo que hace él o su Secretario de Seguridad Pública o sus Policías Chupa-Ductos o sus políticas sociales para crear 80 mil nuevos pobres en dos años.
Yeiii.
Puebla es una fiesta: Mientras el secretario de Seguridad del Estado,Facundo Rosas, encabeza la red para la protección a la banda El Gasparín para el robo pacífico a Pemex, el secretario de Seguridad Pública de la capital, Alejandro Santizo, halconea la zona para el tránsito libre y democrático de los vehículos ordeñadores, el gobernador determina gastarse 800 millones de pesos —¡Ay mi píloro, Jesucristito!— para un chingado trenecito Puebla-Cholula.
—Querido lector no olvide que @Rafagobernador ha hecho una serie de gastos inútiles como los 7 mil millones de pesos para el Museo Internacional Barroco; 300 millones para el Teleférico que nomás no queda; 400 millones de la Ruedota; los 56 millones de la ciclopista más cara del país, los 713 millones de pesos para la remodelación del Cuauhtémoc y bla, bla, bla (ya no les digo más hasta que contraten su seguro médico, digo por seguridad y porque no quiero que mañana me escriban alterados con aquello de que yo los enfermé con tanta palabrajería mal acomodada en una hoja)—
Nomás para que vean que no exagero con mis hiperventilaciones, les haré mis cuentas eloteras para que se den un quemón de la ineficiencia del gobierno morenovallista para mejorar la calidad de vida de los poblanos.
De acuerdo a los datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social de 2013, en la Puebla morenovallista se generaron 260 mil nuevos pobres moderados y extremos entre 2011 y 2012.
260 mil nuevos pobres que se rehusaron a entrar a la modernidad morenovallista que colocó a Puebla como la tercera más jodida del país.
—Entre 2011 y 2012, el gobernador trató de desmantelar la Secretaría de Desarrollo Social, hizo cambio de titular como en tres ocasiones, y disminuyó el presupuesto de la dependencia en materia asistencialista. Por supuesto, su prioridad en esos años fueron los puentes colgantes, el CIS, los pomposos festejos del 5 Mayo, los conciertos masivos gratuitos y otras ocurrencias que gracias a Dios de momento no me acuerdo—.
Para el 2015, el Coneval determinó que en Puebla existen 80 mil nuevos pobres y que la entidad pasó del tercer lugar al cuarto, debido a un lamentable desplome de Oaxaca.
Entre 2011 y 2014, en Puebla existen 340 mil nuevos pobres y aun así @Rafagobernador tuvo la puntada de salir a festejar los resultados del Coneval.
Me es muy grato anunciar que #Puebla avanzó una posición en el ranking nacional de evaluación de @Coneval.
— Rafael Moreno Valle (@RafaGobernador) julio 23, 2015
¿También esos 340 mil nuevos pobres de los últimos 5 años querrán festejar con el mandatario?
No lo creo.
Por si fuera poco su festejo, el proyecto de implementar un chingado tren Puebla-Cholula de 800 millones de pesos en estas condiciones es para llorar. Supongo que el mandatario está considerando que alguno de sus más de 360 mil nuevos pobres pueda hacer el bonito recorrido para cruzar la ciudad un domingo cualquiera.
Lo único claro es que la mayoría de las obras del mandatario están diseñadas para “embellecer” la ciudad, finalmente, los pobres no brillan, ni dan vueltas ni son gigantes que se miren desde las entradas.
El tan traído y llevado Mario Marín y su ex-secuaz, Javier López Zavala abandonaron el gobierno de Puebla con el descrédito a cuestas pero con 100 mil pobres menos. Cien mil menos de como recibieron la entidad —y eso que sus secretarios terminaron en la cárcel o fugados por enriquecimiento ilícito, eh—.
El gobierno vanguardista de RMV tiene 340 mil nuevos pobres ¿Y?
Hagamos una fiesta con todos ellos, total son un chingo.
Miau.