Friday, 29 de March de 2024

Dios en el Poder

Martes, 26 Agosto 2014 01:47
Selene Rios Andraca

El etílico secreto de Luis Maldonado

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En Casa Aguayo ♫♫ que no para la fiesta, don´t stop the party ♫♫. Todos los días son viernes. Todos los días parece, huele, sabe, se siente, se vive como si fueran viernes. Porque para la bohemia, la poesía, los tragos y la buena compañía no hay mejor día que hoy (el que sea). No importa si es lunes. Y tampoco importa si hay 100 presidentes auxiliares pidiendo una audiencia.

Pasadas las dos de la tarde comienza el festín en el Garibaldito que está frente al Alto: un traguito por aquí, un poema por allá; un traguito por aquí, una firma por allá; un traguito por aquí, otra firma por allá; un traguito por allá, una ranchera por acá. Otro traguito, un besito por favor.

—Ni los mariachis ni los norteños del Alto comienzan tan temprano como los de enfrente—.  
**

Aún no sé en qué estado dijo lo que dijo.

Nadie me quiso precisar cuántos caballitos habían desfilado por su mano cuando dijo lo que dijo.

Por supuesto que mis fuentes se negaron a decir cuántas botellas se vaciaron ese día que dijo lo que dijo.

No me aclararon tampoco si el Secretario dijo lo que dijo antes o después de declamar la Suave Patria velardista.

Me dijeron, eso sí, que el Secretario ya no estaba en condiciones de recitar ni al zacatecano ni a nadiecuando dijo lo que dijo.  

Quiero creer que fue un alucine de la noche provocado por la ingestión eufórica del suero de la verdad reposado, por el sentimentalismo que le despiertan los mariachis, por la melancolía de sus 2 Premios Nacionales de Periodismo que hacen reír a más de uno o por el coraje reprimido de las piedras de gran calibre. Quiero pensar que todo fue parte de una de sus chacoteadas más. Y que por eso dijo lo que dijo.

Esta columna no tiene la intención de crucificar al Secretario General de Gobierno por su condición etílicamente bohemia.

Ese Luis Maldonado es un loquillo…

Bien dicen que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad.

Y seamos realistas: Luis Maldonado no es un niño.
**
Cuando los calló, todos pensaron que era hora del Rincón Poético del Secretario.

Intentó ponerse de pie, pero lo traicionó su cuerpo abotagado.

Soltó una carcajada.

Quiso levantarse otra vez, pero falló.

Le gritó a Benito para que pusiera orden.

Maldonado puso cara de circunstancia…

—¡Hip! Quiero deshirlesh… algoimportanté… Hip, polii no she me espante que yo lo protejo de la Comisión, de Shalshihuapan, de todo, no tenga miedo… hip… usté es mi amigo... señoresh prepa-prepárenshe que están brindando… ¡Cómo jijos de la chingada no! con el próximo gobernador… este… ¿Cómo she dishe?  
—¿Gobernador de Puebla?— intervino Benito muy modoso.
—Naaaa. Naaaa… Gobernador… shí, puesh de Puebla, pendejosh, de dónde más… Escucha Mariachi… Toca tu mejor repertorio para el próximo gobernador interino de Puebla… ¡Shí sheñor!

Todos aplaudieron.
Clap.
Clap.
Clap.

El mariachi reaccionó con una fanfarria.

Maldonado sonrió y alzó su caballito.

Sheré el gobernador interino, porque Rafael bushcará fuero… qué pendejo

#Plop
 

Después de la noticia, la fiesta se desbordó en sueños cumplidos, música, puros, lágrimas, cigarros, planes, tragos, tragos, tragos, limones, hasta que El futuro Interino ya no pudo más. 

Sha me quiero ir… mi cashaaaaa...

Los policías corrieron a su auxilio para levantarlo del sillón.

Le preguntaron si se sentía bien.

 

El futuro Interino asintió. 

Le preguntaron si quería ir al baño.

El futuro Interino negó.

Nadie se extrañó de la escena: ni los mariachis ni la banda del secretario.

Los policías tomaron al secretario y se lo colgaron de aguilita, lo arrastraron desde el reducido pasillo, las estrechas escaleras hasta el estacionamiento del sótano de Casa Aguayo.

Todo el trayecto balbuceó su interinato.

Con cierta experiencia, los policías lo acomodaron en su camioneta.

Maldonado insistió en su interinato...

Los policías lo felicitaron otra vez. 


Ahora todo tiene sentido: por eso Luis Maldonado es el principal defensor de los Policías Estatales… sin ellos no llega ni al baño ni a su camioneta…

**

Moraleja: El Secretario General de Gobierno no es confiable ni apto para guardar secretos o planes de fuero después de las dos de la tarde…

Queda.