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Partido Humanista y Encuentro Social son dos de las nuevas apuestas que encontramos en este inicio de carrera rumbo a los comicios electorales que se celebrarán este año y tras una temporada sin figuras públicas, nuevamente regresan éstas como bandera de estos movimientos.
Es verdad, cualquier apuesta política debe ser incluyente, si buscamos un cambio y los políticos nos han demostrado que no son la solución para este país, abrir las puertas a ciudadanos de diversas profesiones para tratar de hacer algo diferente no lo veo tan mal, pero tras ver una y otra vez partidos pequeños desfilar y desaparecer me pregunto si la verdadera opción para cambiar a México está en formar partidos políticos.
Por una parte evaluar ¿cuánto nos cuesta como ciudadanos financiar partidos?, ¿cuántos de ellos se rigen por una estrategia con la única finalidad de obtener el presupuesto siendo en realidad un negocio disfrazado? no es difícil engañar a la gente que quiere un cambio y venderle la idea de un nuevo partido, puede ser una apuesta interesante.
En la semana creció con fuerza el rumor del payaso "Lagrimita" para presidente municipal de Guadalajara (quien pese a tener registro aceptado por el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado el 17 de enero aun no ha emitido una versión oficial de su postulación), por su parte el futbolista aun activo Cuauhtémoc Blanco suena fuerte, más como un rumor infundado, como refuerzo para presentarse como candidato en Cuernavaca y ya de una manera más explícita, el actor Alejandro Camacho con Encuentro Social nos muestra su interés por participar, todas ellas figuras públicas respaldadas por el formato de candidato independiente o bien por un pequeño partido, ¿cuánto nos va a costar este intento ciudadano?
Dejo en claro que no censuro estos intentos, quizás muchos de ellos con la mejor intención, pero si cuestiono a la larga la efectividad de este camino. ¿Cuál es la verdadera raíz del problema y que por obligación debería ser atendida por los partidos políticos e incluso por el INE?
Los ciudadanos tenemos algo muy poderoso que se llama voto, ¿por qué vota la gente realmente en México?, ¿por costumbre, por el menos peor?, ¿qué hace de diferente a un partido grande de un pequeño cuando la gente solo vota por votar y muy pocos son los que realmente realizan un voto por convicción?
Las herramientas las hay, pero definitivamente no se ha hecho un trabajo correcto en la manera de difundir su uso, ¿cómo madurar políticamente si los spots del INE manejan un discurso como si le hablaran a un niño? entiendo la postura publicitaria de hacer un mensaje fácil y que pueda alcanzar y entenderse por todos los sectores de la población pero veámoslo con nosotros mismos, ¿cuándo nuestros hijos maduraron y se les habló como adolescentes y después como adultos jóvenes?, muy sencillo, cuando se les cambió el discurso y la manera de hablar, ¿no podría el INE dar ya ese estirón y volverse un verdadero vehículo del pensamiento crítico?
¿Cuál es la propuesta que tienen actualmente los partidos políticos?, ¿están a la altura de lo que necesita el país? si se nos promueve el interés para que las revisemos, ¿cuántos partidos tendrían que proponer cosas más relevantes que llamadas de larga distancia, tal cual spot de compañía de telefonía, para mantener su permanencia en el poder? ¡esa es una forma de mover al país y que ningún partido hace!
Las herramientas ya las tenemos y no solo se trata de maquillar el sistema mostrando una forma diferente de hacer la mismo de siempre, celebro que haya nuevos partidos, ¿quieren hacer las cosas distintas? ¡adelante, cambiemos la fórmula! dejemos atrás al representante ciudadano, ¡vamos todos a gobernar!, ¡vamos todos para hacer seguimiento de la efectividad de nuestros legisladores!, ¡vamos todos y exijamos mejores salarios y condiciones laborales! y la mejor forma de ir es con un voto estudiado, hemos errado el camino del representante ciudadano, en México es darle el poder y eso no debe ser, la idea es colocarlo para que nos represente en el congreso, en el senado, en donde sea los ideales del pueblo el cual siempre está a su lado, al pendiente del país y de las decisiones que se toman, no atrás resignado y en espera de un mesías en la política que cambie todo.
¡Hagamos las cosas diferentes, no es cuestión de dinero ni imagen es cuestión de compromiso! ¡Y tanto el INE como los partidos políticos aun están lejos de cumplir esa función que les corresponde por razón de ser!
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