El director del Observatorio de Salarios de la Ibero, Miguel Santiago Reyes consideró que la línea 2 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), generará un impacto económico negativo a las familias poblanas debido a que su costo es más caro en comparación con los seis pesos que se pagan en cualquier otra ruta. 

En entrevista, el académico detalló que si a diario son 100 las personas que ocupan esta línea y pagan un peso con cincuenta centavos extra, el ingreso aproximado para el concesionario será de 100 mil pesos diariamente. Sin embargo, comentó que esta situación no beneficia a los poblanos, pues el servicio carece de unidades y no satisface las necesidades de los usuarios al cien por ciento. 

Si son cien mil las personas que se transportan a diario y pagan un peso mas, son cien mil pesos más para la empresa o para quien maneja la concesión. Y esto no es redituable porque el servicio es peor y se carece de unidades", argumentó.

Reyes Hernández dijo que uno de los principales problemas en la línea 2 es la carencia de unidades tanto articuladas como alimentadoras, y criticó que aunque esta iniciativa se creó para mejorar la movilidad en la ciudadana, no ha tenido los resultados esperados.

El problema es que lanzaron la línea 2 y no previeron que se necesitaban más camiones. Están generando un problema en los tiempos de trasladado y esto ocasiona indeficiencias como más gastos para las familias y mayor estrés", asentó.

Miguel Santiago recalcó que con las rutas que salieron de circulación en la 11 Norte-Sur, la demanda de los ciudadanos se cumplían, además de que iban sentados y llegaban más rápido a sus destinos.

El pasado viernes 10 de abril entró en operaciones la RUTA 2 en la avenida más transitada de la ciudad.

El proyecto de modernización instaurado por la administración morenovallista consistió en el retiro de más 376 concesiones —476 unidades— de la 11 Norte-Sur para dar cabida al nuevo sistema supuestamente operado por Autobuses de Oriente (ADO), pero el arranque fue desastroso.

Además de las prolongadas esperas y de los autobuses sobresaturados de personas, el gobierno morenovallista olvidó conectar a ciudadanos de ocho colonias de sur y de dos juntas auxiliares, Azumiatla y Tecola, por lo que más de 3 mil poblanos tuvieron que caminar hasta 9 kilómetros para poder abordar una unidad.