Un total de 371 trabajadores académicos y administrativos de la BUAP, recibieron un reconocimiento y estímulo económico por sus 20 y hasta 40 años de servicio en la BUAP, de manos del rector de la BUAP, Alfonso Esparza Ortiz.
En ceremonias por separado, el encargado de la máxima casa de estudios celebró a 128 empleados administrativos y 243 docentes, con la entrega de reconocimientos y cheques por 2 mil 500, 5 mil, 10 mil, 15 mil y 20 mil pesos por 20, 25, 30, 35 y 40 años de desempeño, respectivamente.
Subrayó que de este modo, la BUAP trata de corresponder a las contribuciones que ellos le han dado, "han transformado la unidad, han participado en diferentes procesos, han tenido la oportunidad de ver cómo la institución ha ido avanzando y por supuesto, han sido partícipes de dicho desarrollo", agregó.
Y destacó que es sólo una parte de las políticas que ha promovido en su gestión como rector y que forman parte del Plan de Desarrollo Institucional (PDI), como parte de todo un Programa de Compromiso, Unidad y Bienestar de los Recursos Humanos en la universidad.
Pues además mencionó, durante su primer año de gestión, impulsó los concursos para el mejoramiento de las condiciones laborales de trabajadores académicos y administrativos de la institución, de los que han resultado la entrega de más de mil definitividades, 400 transformaciones o ascensos y la suma de 110 nuevas plazas docentes, también como una forma de reconocimiento a sus esfuerzos y capacitación.
También enfatizó que se instruyó una reingeniería en el Hospital Universitario e inició la construcción de la Torre Médica de Especialidades, con lo que se buscará satisfacer otra de las demandas de los trabajadores de la institución, de mejores y más rápidos servicios de salud.
Otros beneficios señaló, fue el incremento a los bonos anual y del Día del Maestro, así como los de productividad y viáticos, la ampliación del Círculo Infantil y la reciente creación del Fondo de Préstamos, con el que los trabajadores pueden obtener dinero a crédito y muy bajo interés.
Pero enfatizó que todavía quedan algunos más por concretarse, como un programa de arraigo para profesores en edad de jubilación con un atractivo plan de percepciones económicas y la próxima actualización al Reglamento de Ingreso, Permanencia y Promoción del Personal Académico (RIPPPA), para garantizar un trato más justo, equitativo y transparente en la contratación, reconocimiento y ascenso de los docentes.