Un hombre de 35 años quien padecía una enfermedad mental, decapitó a su madre de 66 años y terminó con su vida lanzándose a las vías del tren, en la comunidad de Farmingdale, en el suburbio de Long Island, Nueva York.
El hombre abandonó el cadáver de su madre a mitad de la calle antes de suicidarse, por lo cual los vecinos asumieron que se trataba de una broma por la cercanía con Halloween, sin embargo, la policía confirmó que se trataba de Patricia Ward, una profesora asistente de artes literarias de un centro educativo de la localidad.
La cabeza del cadáver fue pateada 6 metros y unos minutos después su hijo saltó frente a un tren que llegaba, lo cual ocasionó su muerte instantánea alrededor de las 8:15 de la noche, hora y media después del asesinato.
Derek Ward tenía un pasado criminal y había padecido de problemas psiquiátricos durante una década, se encontró una pistola y 100 píldoras de Valium al cadáver cuando falleció.
La señora Ward fue apuñalada varias veces antes de fallecer y las costillas se le fracturaron.